Dookoła Polski 10 dzień (Golińsk-Wyszków?) )

Día 10 Miércoles 13.07.2011!!!

Distancia 153.2 km Tiempo 9h15 Vel. media 16.5 km/h Vel. máxima 57.7 km/h

Esta iba a ser la última etapa difícil y montañosa durante mi viaje. Fue dura y agotadora, se podría decir hardcore. Como en una buena película de terror, la tensión crecía (también el cansancio) con cada hora y la meta fue puro Hitchcock.

El principio fue suave, fácil y agradable hasta Krzeszów. En el lugar visité una magnífica, incluso muy grande, basílica. Después de verla y tomar algunas fotos, me dirigí hacia Kamienna Góra. Luego, en el camino hacia Kowary, una subida difícil y, como suele ser, un descenso espectacular. Pero la más difícil fue la siguiente desde Piechowice hasta Szklarska Poręba Dolna. Corta pero con una pendiente + calor = ¡masacre! Cuando llegué, bebí dos aguas minerales en la tienda local. Durante parte de la subida me acompañó un ciclista local. Un poco me envidiaba por la expedición y yo le envidiaba a él porque iba sin algo como mi "majdanu". Luego hice otra subida, yendo a Świeradów. En el camino, la famosa "curva de la muerte". Después de Świeradów giré hacia Nowe Miasto y por última vez entré en nuestros vecinos del sur. Desafortunadamente, durante toda la etapa el calor fue muy intenso y creo que en la República Checa fue el punto culminante. También hubo mucho tráfico. Cansado, vi una señal que indicaba un camping. En el lugar resulta que el propietario era un holandés que puso precios prohibitivos para mí. Si hubiera tenido más suerte (pero era día 13), el día siguiente habría sido gratis por una promoción. Pero si hubiera sabido cómo terminaría este día, a pesar de los altos precios seguro que me habría quedado. Difícil, Jarek tonto aprendiendo de la experiencia ;) Llegué a Bogatynia, luego a Turoszów. Las carreteras estaban en reparación, mucho tráfico y ningún lugar para alojarse. Después de salir de la carretera principal llegué a Wyszków, que según los locales, no estaba inundado. Esta es otra reminiscencia musical. Al lado de una tienda, conversaciones y un pensamiento dorado: "Si te quedas en casa, no verás algo realmente hermoso." Los habitantes que terminaban el día con una cerveza me explicaron cómo llegar. Desgraciadamente, me perdí y, como se acercaba la noche y comenzó a lloviznar, monté campamento en un terraplén formado por una mina de lignito. Este fue probablemente el lugar de acampada más extraño durante la expedición. Para levantar el ánimo preparé gelatina en la tienda, porque empezó a llover intensamente. Y por la noche hubo una tormenta realmente fuerte con viento y relámpagos. Por suerte, (en estas desgracias) la tienda aguantó.