8. Pe platoul Cârligate

Una de las cumbres más altas de los montes Apuseni supone un desafío para cualquier ciclista que se precie. Alcanzando una altitud máxima de poco más de 1.700 metros, esta propuesta presenta un desnivel de 1.140 metros y una longitud de 48 km. Es la ruta de bicicleta más exigente y recomendamos no recorrerla cuando las condiciones meteorológicas no son favorables.

El sentido recomendado presenta una ascensión pronunciada al principio, durante la cual probablemente tendrás que empujar la bicicleta. Se elige esta opción para poder disfrutar después de más de 20 km de larga bajada.

La subida comienza junto al arroyo Firii y dura aproximadamente una hora, dependiendo del ritmo de cada uno. El esfuerzo se ve recompensado con creces por las vistas desde la cima. Los numerosos caminos pueden provocar confusión, pero la orientación es sencilla: hay que seguir la cresta durante unos 9 km. No olvides que estás en una cresta de montaña y las tormentas de verano pueden formarse muy rápido. ¡Cuidado de no quedar atrapado arriba!

La bajada desde la cresta se realiza siguiendo la marca de banda roja y llega hasta el lago Vărășoaia y luego a Padiș. Precaución en esta bajada, ya que la grava y el barro pueden causar problemas. Un punto de avituallamiento se encuentra en el refugio Padiș, y luego la segunda parte del descenso es más suave.